lunes, 11 de febrero de 2008

Nunca quiero ser famoso

Es curioso como hay mucha gente que desearía ser famosa, que lo reconozcan en la calle y que sus fanáticos lo aclamen y griten su nombre cuando lo ven en la calle.

Creo que no hay cosa que odiaría más que eso. Hace un par de días estaba en el aeropuerto y a la sala de espera llegó el mismísimo Cuauhtémoc Blanco. Sí, el futbolista que jugaba en el América.

En cuanto lo ví sabía que se subiría al mismo avión que yo ya que mi destino sería la ciudad en la que ahora vive, Chicago. Cuando llegó algunas personas lo reconocieron per nadie hizo nada, el señor se sentó justo atrás de mi y esperó como todos a que nos subieran al avión… hasta que una señora se armó de valor, se quitó la pena, fue a pedirle su autógrafo y comenzó la avalancha.

Todo mundo quería un autógrafo o una foto o ambos. Señoras, señores, niños, familias enteras querían pararse junto al astro del balón pié para después poder presumir a sus amigos que estuvieron junto a alguien famoso y por un instante la súper estrella los vió a los ojos y supo que existían.

La hecatombe se acabó cuando tuvimos que abordar y dejó de regalar su firma y posar para las fotos, parecía que lo hubiera salvado la campana.

La verdad no me gustaría nada que un grupo de gente se avalanzara contra mi cuando salgo a la calle, ni tener que tomarme fotos con quién sabe quien, o que alguna señora me haga cargar a su niño ‘para pegarle algo de la magia’ y luego tomarme una foto con el escuincle apestoso y babeado.

Pero a pesar de todo entiendo por que lo soportan. Si hubiera yo sido un gran piloto de autos la fama hubiera sido inevitable, a mayor o menor escala, y eso quiere decir que tendría que hacer lo mismo que el señor Blanco de vez en cuando.

Creo que al final del día es un sacrificio que vale la pena con tal de poder vivir de lo que amas. Afortunadamente yo adoro mi trabajo y no crea ningún tipo de fama.

¿Mi foto y mi autógrafo con ‘El Cuau’? No se los pedí. Yo le voy a las Chivas y jamás me pararía junto o tocaría a un ícono del americanismo como lo es Cuauhtémoc Blanco, no me importa que tan famoso sea.

1 comentario:

La Nena Mounstro dijo...

estoy de acuerdo,yo tampoco podria ser famosa,de solo pensar q cualquier naco se te puede acercar y darte un beso y tomarte una foto mientras te agarra de la cinturita eeeeeewwwww.

y bueeh q mal tino q toco viajar con el "Cuau", y con toda la bola de gatos q corren a pedirles autografos, yo hubiera organizado una sangrienta masacre y hubiera volado el avion con una pasta de dientes y un encendedor!!