lunes, 26 de mayo de 2008

Bienvenidos al museo de Don Gato

Hace algunos días fui a Los Angeles, a uno de esos eventos relámpago en el que te quitan tres días para que manejes durante media hora… sí, es una mentada de madre. El chiste es que como parte del evento nos llevaron una tarde al museo de Don Gato, perdón, a los estudios Sony/Columbia en L.A.

Digo que es el museo de Don Gato por que justo así nos sentimos los que estábamos en el tour. ¿Recuerdan ese capitulo donde Don Gato pone un “museo” en el callejón? Y todo lo que exhibe son “las migajas del pan que se comió tal”, o “la silla dónde se sentó este otro”. Justo esa nos aplicaron en un estudio de Hollywood.

El tour consiste en recorrer las instalaciones y ver cualquier cantidad de estudios de grabación… por afuera. La verdad exagero, entramos al estudio de Jeopardy y Wheel of Fortune. Claro que estaban prácticamente vacíos por que ambas series están en off-season.

Lo que sí nos enseñaron fue el poste donde Jennifer Garner hizo una escena de 13 going 30, y la fachada del edificio donde se grabó la escena de la graduación en Spider-Man. También nos enteramos que la amiga de una monita de seguridad vio a Will Smith la noche anterior.

También es educacional el evento este, aprendí que las puertas de los estudios se llaman elephant doors por que cabe un elefante por ellas… (cri, cri). Sí, eso pensamos también nosotros.
Pero eso no es lo mejor, pasamos por una silla donde Andy García se había sentado a comer su lunch hace dos semanas y pudimos ver el espacio de estacionamiento donde Brad Garret (Everybody loves Raymond y Till Death) parquea su Maseratti. Con tanta emoción pensamos que no habría nada mejor, pero estábamos equivocados. Lo mejor del tour… que digo del tour, lo mejor del viaje, fue que pudimos ver el carrito de golf con forma de Escallade de Adam Sandler. ¡Woho, qué emocionante!

No se si esos tours cuesten, la verdad espero que no por que son una real perdida de tiempo. Lo único que uno puede sentir es que lo estafaron feo, que le vieron la cara y que se aprovecharon gandaya de la fama del código postal. Si hubiera tenido que pagar por eso hubiera salido con más dignidad después de un asalto en tepito que de ahí. Hasta me hubiera enorgullecido de las refinadas y perfeccionadas técnicas de los asaltantes para despojarte de tu dinero de manera honrada y derecha. Nada de te voy a enseñar un pedazo de piso pintado y pagame cualquier cantidad de dólares, NO. Aquí la cosa es neta, de frente y como hombres: ¡Caite con la lana o te saco la tartamuda, cabrón! Como debe ser chingao.

En fin, si van a L.A. (la verdad no entiendo por que harían eso al menos que fueran a Disney o a Six Flags) no pierdan su tiempo en los estudios de cine, son igual de falsos que las películas que venden, con la diferencia que de la película uno lo espera.

Ya no hay ética ni pa robar... carajo.