martes, 19 de febrero de 2008

¿Me entrenas a mi o a ella?

Tengo tres perras, una Bischon, una Cocker y una mestiza. La mestiza es la más joven de las tres y si son fieles seguidores de este espacio saben que llegó a nosotros saliendo de una situación precaria.

Es la que rescataron con sus hermanas en un bote de basura cuando tenían dos semanas. El monstruo ese se llama Aacini y es un torbellino que destruye lo que esté a su paso, por lo que decidimos entrenarla.

Eso de entrenar perros es bastante complicado por que más que entrenar al perro te entrenan a ti. Tienes que aprender a entender lo que te dice tu perro con su comportamiento y su lenguaje corporal y tienes que aprender a hacer ciertas cosas de cierta manera, la verdad es algo difícil pero también es muy satisfactorio.

Su comportamiento ha cambiado aunque sigue siendo juguetona y traviesa y lo más importante es que nosotros también estamos cambiando y ahora entendemos más a nuestras hijas. Ojalá y todo mundo entrenara a sus perros por que si quieres un animal bien portado hay que dedicarle tiempo… como si fuera un hijo.

lunes, 11 de febrero de 2008

Nunca quiero ser famoso

Es curioso como hay mucha gente que desearía ser famosa, que lo reconozcan en la calle y que sus fanáticos lo aclamen y griten su nombre cuando lo ven en la calle.

Creo que no hay cosa que odiaría más que eso. Hace un par de días estaba en el aeropuerto y a la sala de espera llegó el mismísimo Cuauhtémoc Blanco. Sí, el futbolista que jugaba en el América.

En cuanto lo ví sabía que se subiría al mismo avión que yo ya que mi destino sería la ciudad en la que ahora vive, Chicago. Cuando llegó algunas personas lo reconocieron per nadie hizo nada, el señor se sentó justo atrás de mi y esperó como todos a que nos subieran al avión… hasta que una señora se armó de valor, se quitó la pena, fue a pedirle su autógrafo y comenzó la avalancha.

Todo mundo quería un autógrafo o una foto o ambos. Señoras, señores, niños, familias enteras querían pararse junto al astro del balón pié para después poder presumir a sus amigos que estuvieron junto a alguien famoso y por un instante la súper estrella los vió a los ojos y supo que existían.

La hecatombe se acabó cuando tuvimos que abordar y dejó de regalar su firma y posar para las fotos, parecía que lo hubiera salvado la campana.

La verdad no me gustaría nada que un grupo de gente se avalanzara contra mi cuando salgo a la calle, ni tener que tomarme fotos con quién sabe quien, o que alguna señora me haga cargar a su niño ‘para pegarle algo de la magia’ y luego tomarme una foto con el escuincle apestoso y babeado.

Pero a pesar de todo entiendo por que lo soportan. Si hubiera yo sido un gran piloto de autos la fama hubiera sido inevitable, a mayor o menor escala, y eso quiere decir que tendría que hacer lo mismo que el señor Blanco de vez en cuando.

Creo que al final del día es un sacrificio que vale la pena con tal de poder vivir de lo que amas. Afortunadamente yo adoro mi trabajo y no crea ningún tipo de fama.

¿Mi foto y mi autógrafo con ‘El Cuau’? No se los pedí. Yo le voy a las Chivas y jamás me pararía junto o tocaría a un ícono del americanismo como lo es Cuauhtémoc Blanco, no me importa que tan famoso sea.

Debería hablar mil millones de idiomas

El otro día visité uno de los blogs que veo con cierta frecuencia y me encontré un video que se llamaba Korean Madness en el que un par de muchachitas, coreanas lógicamente, van a un programa de televisión a hacer un minishow en un como karaoke. Son una de las cosas más chistosa que he visto en mucho tiempo. Me reí hasta cansarme, ya saben, de esas veces que apenas puedes respirar.

El chiste es que en ese programa de televisión ponen letritas color neón en la pantalla mientras cantan y me molesta no saber que dicen. Lo que canten no me importa, pero las malditas letritas me dan un chorro de intriga.

Hay otro video de ese mismo programa que le pone subtítulos a las letritas y dicen cosas como ‘la presión ha aumentado 300%’, y no estoy inventando eso.

También me encantaría saber que tanto dicen los conductores del programa por que todo mundo se la pasa riéndose, yo se que se ríen de las muchachas chistosas, pero sería bonito saber que dicen.

Lo mismo me pasa con el Anime, aunque esté traducido al ingles o con subtítulos igual me encantaría hablar japonés para no perder alguna idea en el ‘teléfono descompuesto’ del traductor.

Y ni hablemos del chino, ese más nos vale a todos aprender a hablarlo por que dentro de poco nos van a invadir y el mundo será una gran colonia china o algo por el estilo… pinches chinos.

La cosa es que me doy cuenta que los idiomas y las culturas que más me interesan son las orientales. Prefiero aprender a hablar chino que italiano, y japonés que alemán. No se por que sea eso, probablemente me dan mucho más curiosidad como cultura, por que quién diga que no hay vida extraterrestre en este planeta no le ha echado un ojo a los países de oriente. Sólo a alguien de otro planeta se lo ocurriría lo que a estos tipos.